Regresa la icónica Lara Croft a la gran pantalla con Tomb Raider (Roar Uthaug, 2018). En esta ocasión, Alicia Vikander es la encargada de dar vida a la aventurera más famosa de los videojuegos.
A mediados de los 90, Lara Croft, la pixelada protagonista del videojuego Tomb Raider, se convirtió en todo un fenómeno. Que su aspecto fuera casi una exagerada parodia de la fisonomía femenina, un personaje que podría haber sido ideado por Russ Meyer, no impidió que su popularidad creciera como la espuma, todo lo contrario. Se convirtió en un personaje conocido incluso fuera del mundo de los videojuegos, encarnada en el mundo real por una serie de modelos que hacían apariciones en convenciones y celebraciones del estilo. La más popular de estas modelos fue Rhona Mitra, que aprovechó la visibilidad que le dio el trabajo para entrar en el mundo del cine y protagonizar películas como la genial (porque digan lo que digan es genial) Doomsday – El día del juicio (Doomsday, Neil Marshall, 2008).
El momento álgido de popularidad de Lara Croft coincidió con el momento álgido de popularidad de Angelina Jolie, así que la actriz fue inmediatamente escogida para encarnar al personaje en dos películas: Lara Croft: Tomb Raider (Tomb Raider, Simon West, 2001) y Lara Croft Tomb Raider: La cuna de la vida (Lara Croft Tomb Raider: The Cradle of Life, Jan de Bont, 2003). Dos películas algo mediocres que no han envejecido demasiado bien.
Y, como es la norma, la popularidad de Lara Croft bajó, igual que bajó la popularidad de los juegos. En 2013 se hizo un reboot de la serie, titulado simplemente Tomb Raider, volviendo a poner a Lara Croft de actualidad. Es este reboot el que sirve de base para la nueva película Tomb Raider. El aspecto de Alicia Vikander imita al de esta Lara Croft más humana, e incluso hay varios momentos en la película que son guiños a momentos del juego.
Como película de aventuras, el film de Roar Uthaug tiene cosas positivas y cosas negativas. En la parte positiva, hay diversas secuencias de acción muy logradas, que sumado a su rápido ritmo da como resultado un film muy entretenido. Y eso a pesar de que tarda un poco en entrar en la historia, se podría haber aprovechado el prólogo algo mejor en lugar de ofrecer información que luego se repite, ya que invierte bastante tiempo en desarrollar a Lara Croft. En la parte negativa, los villanos se introducen muy tarde en la acción, lo cual es una lástima ya que el principal villano está encarnado por Walton Goggins.
Lara se pasa gran parte del film sobreviviendo a caídas, golpes y heridas varias, haciendo saltos imposibles y resolviendo enigmas, como en los videojuegos. Pero también muchos de estos elementos, como las trampas mortales, son elementos clásicos del cine de aventuras. El esfuerzo por hacer de Lara Croft un personaje más “realista” le inyecta más emoción a las escenas de riesgo, por eso se hace más evidente lo poco interesante que es la historia que cuenta.
Como es la norma en la actualidad, hay mucho sequel bait de cara a excitar a los espectadores con la perspectiva de próximas entregas. Sin embargo, los aspectos negativos se podrían solucionar fácilmente en siguientes películas, ya que el mundo y su protagonista ya se han presentado y construido, así que una nueva entrega puede que resulte más redonda e interesante.
Como ya he dicho, Tomb Raider es un film muy entretenido a pesar de sus fallos, que pueden disfrutar tanto fans del juego como aquellos que simplemente quieran divertirse con una película de aventuras que les lleve a lugares lejanos y misteriosos.
Estreno en las salas españolas el 16 de marzo
Lara deja atrás todo lo que conoce y va en busca del último paradero conocido de su padre: una legendaria tumba en una isla mítica que podría estar en algún lugar de la costa de Japón. Pero su misión no será fácil; de hecho, llegar a la isla entrañará de por sí enormes peligros. De repente, Lara tendrá que enfrentarse a retos aún mayores y, contra viento y marea y gracias a su inteligencia, su fe ciega y su espíritu inquebrantable, debe aprender a superar sus límites mientras se adentra en lo desconocido. Si sobrevive a esta peligrosa aventura, podría ser su bautismo de fuego para ganarse el nombre de Tomb Raider.