Es uno de los superhéroes más longevos aparecidos en un cómic y un gran desconocido por el público. ¡Shazam! nació bajo el nombre de Captain Marvel, que se publicó desde 1940 hasta 1953, año en que los tribunales reconocieron el «plagio» del personaje a Superman perteneciente a DC Cómics. Años después la editorial Marvel aprovechando que estaba libre registraría el nombre Captain Marvel y lo comenzaría a usar en un nuevo personaje de su universo. Carambola del destino, DC Cómics se hace con los derechos del personaje original con el tiempo y cuando decide recuperarlo con el mismo nombre sufre la reclamación de Marvel Cómics por lo que termina siendo enseguida rebautizado como Shazam. Además, este personaje ostenta el honor de ser el primer superhéroe en ser adaptado con actores en un serial de 12 capítulos estrenado en 1941. Y con esta historia a sus espaldas, ¡Shazam! ve en 2019 su primera gran adaptación en pantalla grande.
El mago Shazam lleva miles de años en la búsqueda de un paladín al que otorgarle todos sus poderes para prevenir el mundo de los mayores males. Finalmente es Billy Batson, un joven huérfano de 14 años, quien recibe los poderes de los dioses del Olimpo (Salomón, Hércules, Atlas, Zeus, Aquiles y Mercurio) ante el peligro de una nueva amenaza en la tierra y sin tiempo a ser formado. Billy se convertirá en un superhéroe al decir ¡Shazam! teniendo las capacidades de disparar rayos con sus manos, de superfuerza, supervelocidad, … poderes que irá descubriendo poco a poco gracias a Freddy, su hermano (de adopción), un experto en Superman, Batman, …
¡Shazam! escapa de esas cintas de superhéroes de corte serio que tanto han invadido las últimas adaptaciones y ofrece una visión más divertida, entretenida e infantilizada de un héroe con capa, lo que puede contrariar al público adulto pero que seguro agradará a los más jóvenes. Ambientada en época navideña, veo ¡Shazam! como una suerte de Gremlins o Aventuras en la gran ciudad para los pequeños de hoy.
El arranque es pausado pero debido a que es un personaje desconocido la historia de sus orígenes resulta hasta interesante, y la parte «aburrida» de exploración de poderes se resuelve con gracia, de forma amena y ciertamente con rapidez. Dr. Thaddeus Sivana, el malo, va directo al grano como ya sucedía con Buitre en Spider-man: Homecoming, la rivalidad es con el héroe por interferirse en su camino y no contra el mundo así que la amenaza se cierne sobre el protagonista y los suyos lo que ayuda a hacer más cercano el peligro de cara al espectador.
Tras algunas producciones desconcertantes, DC Cómics logra una película que va más allá de quemar cartuchos a toda castaña y meter cuanto más mejor, ¡Shazam! construye desde abajo y aunque hay guiños a otras franquicias camina en solitario paso a paso y quien sabe si en el futuro habrá más y mejor.