The Purge: La noche de las bestias (The Purge, James DeMonaco, 2013) parte de una interesante premisa que no acaba de ser desarrollada de forma interesante.
En un futuro cercano, durante 12 horas los americanos gozan de total libertad para cometer los crímenes que quieran sin sufrir ninguna condena por ello. Asesinatos, ataques, robos… Todo está perdonado mientras dure la purga. Es una premisa prometedora, aunque no muy original: el director se inspiró en un episodio de la primera temporada de Star Trek, El retorno de los Archons, en el cual los tripulantes del Enterprise llegan a un planeta donde tienen una ley parecida, solo que en El retorno de los Archons este periodo se llama “la hora roja”.
DeMonaco ha comentado también otras influencias como la ya clásica Battle Royale de Kinji Fukasaku. Es una lástima que bebiendo de tantas geniales fuentes el producto final sea más bien mediocre y ni de lejos tan impactante como aseguraba el hype que la precedía.
James y Mary Sandin (Ethan Hawke y Lena Heady, respectivamente) son el civilizado matrimonio protagonista. Ellos y sus dos hijos planean pasar la purga encerrados en casa, como hacen la mayoría de los ciudadanos con el suficiente dinero para permitirse un gran sistema de seguridad. A lo largo de la noche se verán envueltos en la purga cuando su hijo deje entrar en casa a un pobre vagabundo perseguido por unos jovencitos que son algo así como la versión pija de los drugos de Alex que acechaban las calles en La naranja mecánica.
Al principio, DeMonaco retrata a los Sandin y el mundo en que viven de forma interesante. Especialmente me llamó la atención la manera en que se muestra la forma rutinaria en que los ciudadanos se preparan para la purga. Es en estos primeros momentos en que vemos de forma más efectiva lo enferma que está una sociedad como la que aprueba semejante ley.
Por desgracia, cuando se inicia la purga en la película se inicia también la purga de todo aquello que la había hecho interesante hasta ese momento. El mensaje moralista entra en acción y el director se encarga de señalar con el dedo todo aquello que está mal en el mundo.
Al pobre (y en ocasiones predecible) desarrollo dramático se le suma que los recursos utilizados para crear tensión en el espectador son los mismos que la productora Blumhouse (que produce este film) ha utilizado una y otra vez en sus películas (Paranormal Activity, Sinister, Insidious…), de manera que la parte de asedio a la casa no es tan tensa ni cargada de suspense como podría haber sido.
Si simplemente buscáis algo que os entretenga del calor veraniego y no sois muy exigentes, The Purge puede resultar entretenida, ya que tiene algunos momentos bastante conseguidos. Pero lo cierto es que promete más de lo que acaba ofreciendo.
Estreno en las salas españolas el 12 de julio.