Es posible que el nombre de Django Reinhardt (1910-1953) no nos diga mucho para los que no estamos muy puestos en música, pero él es una pieza clave del Jazz y la música. Creador del jazz manouche y considerado uno de los mejores guitarristas de la historia, logró influenciar el Jazz Americano siendo él europeo.
Django. Mano de fuego de Salva Rubio (guion) y Ricard Efa (dibujo) nos acerca a los orígenes de este influyente músico, partiendo desde su nacimiento y de este modo conociendo su gran familia, todos ellos feriantes de espectáculos nómada. De etnia gitana, Django junto a sus hermanos trapichean por la vida de pueblo en pueblo cuando su afición por la música empieza a florecer y quiere tener una guitarra pero al cambio obtiene un banjo con el que comienza a destacar. El destino le tendría preparado, además de alegrías románticas, un oscuro revés que echará por tierra todo por lo que había estado trabajando y que le obligará a reponerse ante las nuevas circunstancias.
Salva Rubio es también guionista de cómics como El Fotógrafo de Mauthausen o Miles en París, todos ellos grandes trabajos sobre historias y personajes basados en la vida real como el cómic que nos ocupa. Lo que (algunos pueden pensar que) podría parecer algo aburrido, Salva Rubio logra cautivar al lector con hechos y no con parrafadas, estamos viviendo la historia que nos cuenta y eso, además de magnífico, no es nada fácil de hacer sin salirse de la línea biográfica. Y eso sin mencionar el tiempo de documentación necesario que requiere el mismo, si bien, conjuga con los vacíos que puede suponer una época con poca información.
Ricard Efa se encarga de la parte gráfica del cómic, siendo la segunda vez que trabaja junto a Salva Rubio tras Monet, Nómada de la Luz. Con una paleta que nos acerca a la tierra, de colores amarillentos y marrones, salvo cuando el incidente debe hacer brillar y atemorizar el lector con colores más vivos. La labor de Ricard Efa es cuanto menos fascinante, gracias al formato álbum francés con el que se ha publicado podemos casi vislumbrar cada pincelada, eso sin obviar esas viñetas que nos lleva a escenarios de época de principios de siglo XX en que somos uno más de la ferviente actividad social.
Espero no ser el único que tras esta lectura haya buscado música de Django para escuchar y haya releído el cómic con la mirada dejándose perder en sus páginas, en caso contrario también os lo recomiendo. Publicado por Norma Editorial, Django. Mano de fuego es una oportunidad única para conocer la historia de luces y sobras de un artista que ha dejado huella.
El cómic concluye con unas páginas extras que, a modo de biografía con fotografías, conocemos más sobre Django y la dificultad de desenterrar la verdad de la leyenda.