Judee Sill. Éxtasis y redención

El amado y odiado algoritmo de webs y programas que hoy nos condiciona la vida hizo que sonase el tema «The Kiss» de la cantante de folk Judee Sill (1944-1979) en la cuenta Spotify de Juan Díaz Canales, guionista de cómic de obras cómo Blacksad o la nueva etapa de Corto Maltés. Una canción que despertó su curiosidad por conocer más sobre la vida de esta artista a la que no conocía, descubriendo que, en realidad, no había mucha información sobre ella. Una búsqueda llena de preguntas sin respuestas que ha acabado por conformar el comic «Judee Sill. Éxtasis y redención» editado por Norma Editorial. Con guion de Juan Díaz Canales y dibujo Jesús Alonso Iglesias (autor de El fantasma de Gaudí y Los Dalton), este es un viaje lisérgico y catártico al alma de quién fue Judee Sill.

Un texto del crítico musical y guionista Joan Pons abre la publicación, un gran prólogo que nos introduce a la artista y su maldita trayectoria profesional, de cómo cantantes posteriores medio reivindicaron entre sus influencias su música pero sin lograr a ser nunca el foco de un resurgir que, por ejemplo, otorgase la realización de una obra como esta, el cómic de Díaz Canales y Alonso Iglesias, que desentrañe y complete una especie de biografía de su vida con las pocas piezas disponibles hasta entonces.

Por lo pronto, no importa si conocías o no previamente a Judee Sill, el cómic contiene un código qr a una playlist para escucharla a modo de banda sonora mientras lees el cómic. Además de que se trata de una historia que habla de la vida, de las oportunidades y fracasos de una vida.

Judee Sill tuvo un camino lleno de baches en el que gozó de un par de golpes de suerte en el que pudo recomponerse y/o publicar hasta dos álbumes, incluso pudo vivir de la gloria de ser una cantante que despertó interés y buenas críticas con su primer álbum, publicado en 1971. Sin embargo, su trágica muerte a los treinta y cinco años, y las incógnitas alrededor de su vida que llega hasta nuestros días, ha hecho que pase desapercibida para la gran mayoría de nuevos oyentes.

«Judee Sill. Éxtasis y redención» no es una biografía al uso, de hecho, son solo unas pocas situaciones, por todo lo que puede albergar una vida, contada de forma no cronológica, en la que nos sitúa a Judee Sill en momentos de su infancia, o drogándose, en entrevistas, en un centro reformatorio, el día de su boda, en backstages, el día de su muerte, componiendo canciones…

Juan Díaz Canales completa con ingenio las lagunas de información en torno a la vida de Judee Sill logrando un cómic maravilloso que explora los grises de una existencia que muestra autenticidad y no falta a la verdad. El cómic destaca la humanidad de la cantante, de sus alegrías y tristezas, de aciertos y errores, desmontando el mito repetido hasta la saciedad de que la vida de los artistas es siempre idílica. De todos modos, «Judee Sill. Éxtasis y redención» no acaba con la muerte de Judee, sino que arranca entonces dando una extensión a toda su historia.

Cómo se puede comprobar en la imagen superior, el arte gráfico de Jesús Alonso Iglesias es fascinante. A lo largo de todo el cómic su dibujo se adapta a las distintas etapas, el color y acercamiento a los estados anímicos del momento van desde el estilo más formal a la experimentación alucinada de la situación. Las estructuras de sus páginas también se transforman cuando la historia lo requiere.

El gran formato con el que se ha sido editado la obra permite disfrutar de casi cualquier trazo y esas pequeñas aberraciones cromáticas cuando Sill está bajo los influjos de la música. El autor es fiel al espíritu de lo que se está contando y eso ayuda a enfatizar los diferentes estados de emoción de la historia.

¿Qué es la vida, sino una consecución de buenas y malas decisiones, de pequeños aciertos y errores?, con «Judee Sill. Éxtasis y redención» Juan Díaz Canales y Jesús Alonso Iglesias han hecho un gran cómic que muestra admiración y rinde tributo a Judee Sill de una forma respetuosa, cercana y humana, mostrando la honestidad con la que la artista compartió su vida con todos. Sin duda, este puede ser el principio de una gran reivindicación por Judee, además de la llegada de nuevos seguidores a su música, entre los que ya me incluyo.