Luna y Salva, Salva y Luna el orden de los factores no altera el resultado. Ambos resultan ser la felicidad y la perdición de quién nos narra la historia en la primera novela de ficción de Joan Ripollès Iranzo, Quemar el cielo. Un protagonista fácilmente etiquetable como «viejo verde» de 63 años, pero deben saber ya a estas alturas que las etiquetas solo sirven para tener un cierto control de lo desconocido, y en cualquier caso nunca es certero, no al menos al ciento por ciento.
Una novela que se aleja del mainstream que aboga por una escritura directa pero poética, si es eso posible, dejando las de mainstream en nimiedades de calderilla.
Escrito en primera persona, Quemar el cielo cuenta la historia de una pareja menor de edad que aparentemente viajan para conocer mundo, que pensamos/sabemos que en verdad huyen de sus casas tal vez por una relación no muy consentida pero que en realidad escapan de algo muy grave. Estos jóvenes llegan a un pequeño hotel del norte de la península, cerrado por temporada baja, y piden al casero (el narrador) que los acoja por una noche, casi sin opción a escoger este acepta. Noche que los dos aprovecharán para fornicar con el pretexto de insuflar sangre en los genitales del «viejo verde», la estancia se prorrogará durante días, semanas y meses. Las inyecciones de sangre se irán dosificando a lo largo de la novela tanto para los protagonistas como para los/as lectores/as. Un trío que arrinconarán la palabra tabú, gozarán de un lapsus temporal de ausencias morales y sociales viviendo al margen de la realidad, un círculo vicioso que acabará por destapar los oscuros secretos de los nuevos huéspedes.
Lo agradable de leer novelas en la cual desconoces que te vas a encontrar es que cuando estas te sorprenden y gustan, magnificas su argumento y perdonas esos desaires de los protagonistas hacen a la humanidad, que lo empiece a leer en un bus a tientas de no saber su alto contenido erótico/pornográfico y lo acabe en un metro ya consciente de ello puede tener sus consecuencias.
Tenía cierta curiosidad por como Joan Ripollès, del que tan solo había leído sus participaciones en libros de ensayo sobre cine y pulp, se defendería con la ficción y tras leer Quemar el cielo, una historia (en cierto sentido) atemporal, atrevida (algunos dirán transgresora) y liberal, tan solo espero que sea la primera de muchas.
Quemar el cielo, ha sido publicado en España por Ediciones Leteo. Rústica. 218 páginas. ISBN: 978-84-615-5232-0
