La youtuber internacional Miranda Sings da el salto a Netflix con su propia serie de ficción. Haters back off! es la primera serie creada por un artista de YouTube en Estados Unidos, en España tenemos casos parecidos, como el de hace unos años con Qué vida más triste, aunque en esta ocasión era un formato televisivo trasladado a Internet y que luego tenía su oportunidad en la pequeña pantalla.
Que los populares youtubers den el salto a nuevos terrenos es algo que ya va sucediendo desde hace tiempo, la cantidad de seguidores que poseen y el target de público tan concreto que tienen es algo que muchos ansían. Que Netflix haya apostado por uno era cuestión de tiempo.
Miranda Sings es un personaje creado e interpretado por Colleen Ballinger, comenzó a subir vídeos en YouTube en 2008 y hoy en día cuenta con más de siete millones de suscriptores. Miranda Sings es una chica que se cree una estrella del canto pero su comportamiento es infantil y egocéntrico, además de que no canta bien; la excentricidad de la propuesta resulta divertida y es por eso que la fama la acompaña. Al poco tiempo de subir vídeos y tras conseguir un primer un viral en el que enseñaba a cantar, empezó a pisar escenarios de todo Estados Unidos para realizar shows. De hecho, se dice que no sale de su papel en ningún momento cuando está transformada como Miranda Sings.
Haters back off! es una serie de 8 capítulos, de 30 minutos de duración cada uno. Se estrenó en la plataforma de video-on-demand el 14 de octubre de 2016 en todo el mundo. Creada por Colleen Ballinger y su hermano, Christopher Ballinger, Haters back off! cuenta los inicios de Miranda Sings y expande el universo con el que ya cuenta en YouTube dando lugar a introducir nuevos personajes como el caso de Emily (Francesca Reale), su hermana pequeña, y la única persona normal dentro de toda la familia.
Miranda Sings no tiene talento, pero ello no le impide aspirar a ser famosa y gracias al plan de cinco pasos de su tio Jim (Steve Little) ella cree que alcanzará el estrellato. Un plan que consiste en subir vídeos a YouTube y que estos sean virales. En Haters back off! seguimos además la vida de toda su familia, su madre (Angela Kinsey), una mujer hipocondríaca que trabaja de cajera en un supermercado y ve como debe cuidar cualquier decisión que haga para no molestar a Miranda. Después tenemos al tio Jim, un total desastre que se vuelca por completo en el plan de hacer famosa a su sobrina, y de esta forma enmendar errores de su pasado. Tenemos a Emily, la hermana pequeña que se avergüenza del comportamiento de su familia y busca una salida con la pintura. Otro personaje recurrente es Patrick (Erik Stocklin), el mejor amigo de Miranda y que está secretamente enamorado de ella.
La serie goza de una buena factura de producción, la interpretación de los actores es más que valida, sin embargo… todos los personajes (salvo Emily) resultan irritantes. Sus comportamientos tan mezquinos no hacen más que cuestionarte ¿Por qué hacen eso? El principal problema de Haters back off! es que es una comedia que se toma muy en serio a sí misma, tanto que pierde el norte y ni hace gracia. Es cierto que los capítulos, al ser breves, los acabas viendo, la duración total de la serie apenas supera las 4 horas. Por otro lado, es en el último episodio (I’m famous) con la crítica que realiza sobre la búsqueda desesperada de la fama, la soledad y las causas de un ego agresivo, que entiendes la decisión de mostrar así al personaje… pero creo que juega en contra, ya le odias un poquito, bastante.
Les irá bien, el público de YouTube es generalmente también el público de Netflix (o de sus derivados e imbatibles torrents) así que tal vez la «inocencia» de Miranda Sings y su desenlace acaben por hacerles temblar el corazoncito. Es pronto para saber si habrá una segunda temporada, pero yo animaría a los de Netflix a que grabasen algunas de sus actuaciones en directo y las mostraran, como ya hacen con otros cómicos.
