Rimitto es una serie (dorama) de origen japonés que adapta los cómics de la mangaka Keiko Suenobu. Autora especializada en narrar historias de bullying y acoso escolar, que en esta ocasión pone al límite a sus personaje, de ahí el título.
Una clase de secundaria realiza una excursión que les llevará de campamento durante cuatro días, las circunstancias harán que el conductor, agotado de las largas jornadas, se duerma al volante desviándose del camino y abalanzando el autobús sobre un acantilado. Del trágico accidente solo sobreviven cinco chicas, la situación no es favorable al no poder llamar desde sus teléfonos móviles y no disponer de muchos alimentos. Confían en que serán rescatadas, pero las horas se convierten en días y la competencia entre ellas se vuelve insostenible.
Cada una de las chicas tiene sus propios traumas o problemas, desde la alumna que era el blanco de las bromas de clase hasta la incomprendida o la que le tiene privada la libertad de comportarse como una adolescente al tener que hacerse cargo de sus hermanos pequeños al quedarse huérfanos.
Una serie de doce capítulos, de media hora cada uno, que mantienen el ritmo y el interés a lo largo de la trama. Con un buen arranque y un gran desenlace.
Rimitto comienza como un ejemplo visual de la ley de Darwin, la «supervivencia del más apto», siendo una vuelta de tuerca donde los más débiles en la ciudad se convierten en los feroces en el bosque. No hay lideres sistemáticos y viejas heridas reflotan. Las acciones cruentas se apoderan de la situación. Con el pasar del tiempo las necesidades, los sentimientos de culpabilidad, etc. les llevará por nuevos caminos.
Es una serie interesante y muy entretenida. No soy espectador habitual de series japonesas, y desconozco si es normal que los actores suelan ser (sobre todo los masculinos), en ocasiones, demasiado sobreactuados. Otro punto flaco son las escenas de acción, que más allá de crear sorpresa, son ralentizadas hasta la desidia. Lo mejor de Rimitto es la tensión e intriga que logra capítulo tras capítulo, y lo icónico de sus personajes: estudiantes uniformadas manchadas de sangre.
