Artículos

Novelizaciones: El punto de no retorno

¿El friqui nace o se hace? En mi caso, y teniendo en cuenta que no me siento identificado ni me gusta el término “friqui”, no recuerdo ningún momento en que no me  obsesionaran las películas de terror/ciencia ficción, y luego el cine en general; desde que de muy pequeño vi King Kong con Fay Wray gritando a pleno pulmón ante el gran Kong. Luego vino el Frankenstein de James Whale, mi amor por el cine monstruoso ha seguido firme desde entonces. Lo mismo con los tebeos y los libros, no recuerdo ningún momento en que no disfrutara leyendo sumergiéndome en mundos de fantasía. Esta pasión queda reflejada en diferentes actitudes y obsesiones personales, una de las más significativas (y en ocasiones absurda) es mi afición a las novelizaciones.

Novelizaciones: El punto de no retorno

Hace un millón de años, cuando los dinosaurios dominaban la Tierra, y no existía ni el DVD, el Blu-ray, ni siquiera el vídeo, los estudios empezaron a publicar libros adaptando las películas que estrenaban en los cines, apareciendo las primeras hacia finales de los años 20. Hacia finales de los años 90, los únicos que seguían publicando novelizaciones eran los grandes estudios, como una herramienta más de marketing pero ya empezaba a desaparecer. En el siglo XXI ya son una rareza y aunque en Estados Unidos los grandes estudios siguen publicando novelizaciones de estrenos importantes, lo hacen sin llegar a los niveles de los años 80, en que incluso títulos de bajo presupuesto, como el slasher de 1981 Examen final, contaban con su novelización.

King Kong novelizado

Mi interés en las novelizaciones radica en el hecho de que para que aparezcan publicadas en el momento en que se estrena la película, los autores y autoras de las novelizaciones se basan en versiones primerizas de los guiones y se ven obligados a ampliar personajes y situaciones. Es decir, la novelización nos ofrece la oportunidad de “ver” una versión alternativa de la película que adapta, incluyendo muchas veces escenas que son eliminadas en el montaje final. Por ejemplo, en la novelización de King Kong de Delos W. Lovelace podemos disfrutar de la famosa escena del ataque de las arañas que fue eliminado en su momento y que hoy se conoce solo por algunas fotografías.

La peor novelización es la que simplemente coge la película y la traduce en palabras, nada más. La mejor novelización es la que nos ofrece una experiencia nueva, llegando en ocasiones incluso a dar la sensación de que es la película la que adapta el libro. Sin olvidar los casos en los que la gestación de un guion fue particularmente complicada por diversas razones, ofreciendo la novelización una interesante versión alternativa, como en el caso de la adaptación en libro de la tercera entrega de Pesadilla en Elm Street. El mejor ejemplo de esto es la novelización que David Morrell escribió de Rambo: Acorralado Parte II. Morrell, creador de John Rambo en la novela Primera sangre que se convirtió en la película Acorralado, decidió mezclar en su libro elementos del guion que escribió James Cameron, elementos del guion de Sylvester Stallone y elementos de su propia creación. El resultado final es una novela que tiene su propia personalidad, sin parecer una adaptación.

Estas últimas, obviamente, son las más me interesan, especialmente cuando se trata de una película de la que soy fan. Bueno, hay alguna excepción en este sentido. La película de 1986 Inocentada sangrienta de Fred Walton no me gustó, pero su novelización ofrece un final diferente que cambia completamente la historia; un ejemplo bastante conocido entre los aficionados al género.

The lords of Salem

Otro ejemplo, en este caso más reciente, de novelización que se aparta de manera interesante de su contrapartida cinematográfica es el de The Lords of Salem de Rob Zombie, escrita por B. K. Evenson. En ella, no solo aparece en su totalidad el prólogo que Zombie tuvo que eliminar de la película, ya que la muerte del actor Richard Lynch impidió que se completara, sino que toda la parte final es muy diferente al de la película, además de ampliar la biografía y motivaciones de los personajes. Algo parecido hizo Orson Scott Card en su adaptación del film de James Cameron The Abyss, para la que creó toda una biografía para sus protagonistas, además de introducirnos de lleno en la mente de los alienígenas y todas las subtramas que no pudimos ver hasta que Cameron estrenó su montaje del director. En esta misma línea, las novelizaciones de las primeras películas de la saga Star Trek son muy ricas, continuando tramas y personajes que desparecen en los filmes pero son continuados en las novelas. Así, la doctora Carol Marcus que aparece en Star Trek II: La ira de Khan de Nicholas Meyer, interpretada por Bibi Besch, desaparece en las siguientes entregas cinematográficas, pero no es así en las novelizaciones de esas mismas películas. Un caso más extremo en este sentido es el de la novelización de La casa de los horrores de Tobe Hooper que escribió Dean Koontz, usando el pseudónimo Owen West, cuya extensión de la historia llega al punto que no empieza a adaptar el guion de la película hasta que no llega a los últimos capítulos (precisamente la razón por la que me interesó).

novelización videodrome

Algunas de estas novelizaciones se han convertido en auténticas piezas de coleccionista, llegando algunas a venderse en la actualidad por más de 100 euros. En este sentido, dos de mis más preciadas posesiones son las novelizaciones de dos de mis películas favoritas, por las que estoy completamente obsesionado: The Thing de Alan Dean Foster y Videodrome de Dennis Etchison (usando el pseudónimo Jack Martin). Videodrome ofrece un gran punto de interés que son las escenas que se eliminaron de la película o no pudieron rodarse por motivos técnicos, pero resulta especialmente interesante la novelización que hace Alan Dean Foster de la clásica obra maestra de John Carpenter ya que toda su parte final es bastante diferente de la podemos ver en el film de Carpenter. Dean Foster es un experto en la materia y ha escrito, entre otras, las novelizaciones de las tres primeras entregas de Alien y de La guerra de las galaxias (también de la nueva entrega de la saga).

Las novelizaciones, con sus excepciones, no destacarán nunca por su calidad literaria, pero la razón principal por la que busco una novelización es para experimentar una película que me apasiona de forma completamente diferente, como si descubrieras, de repente, habitaciones que no conoces en tu propia casa.