Romain Duris protagoniza la nueva película de Michel Hazanavicius, director de la aclamada The Artist (2011), Mal genio (Le Redoutable, 2017) y OSS 117: El Cairo, nido de espías (OSS 117 : Le Caire, nid d’espions, 2006).
¡Corten! (Coupez!, Michel Hazanavicius, 2022), remake francés del éxito de culto japonés One cut of the dead (Kamera o tomeru na!, Shin’ichirô Ueda, 2017).
En la filmografía de Michel Hazanavicius nos encontramos diversas películas a través de las cuales el director comenta un género o las utiliza para mostrar su amor por el cine. De modo que es natural que se sintiera atraído por una película japonesa que en el fondo trata sobre la pasión por el cine, individuos superando diversas adversidades para crear una película que, si hay suerte, quedará en la posteridad. Hazanavicius muestra mucho respeto por el original, usándolo como punto de partida e incluso haciendo que Yoshiko Takehara repita el papel que interpretó en el film de Shin’ichirô Ueda. Y ahí radica el principal problema del film francés: su efectividad depende de si se ha visto o no la original japonesa.
En caso de que no se haya visto el film japonés, el espectador se encontrará con una divertida comedia que arranca con un grupo de cineastas rodando una película de bajo presupuesto de zombis que pronto se ven atacados por zombis reales. Si bien tiene una puesta en escena al inicio algo artificiosa, la película consigue arrancar bastantes risas gracias a un reparto muy efectivo y divertido, en el que destacan Matilda Lutz, Bérénice Bejo y Romain Duris.
Pero si se ha visto la película japonesa, la cosa cambia. Y si no la has visto, te aconsejo que te saltes este párrafo. Si sigues ahí, tras ver las dos películas queda claro que la japonesa es la versión superior. Y no por motivos esnobs o porque “todos los remakes sean malos” ni nada por el estilo. Objetivamente, la japonesa es más efectiva porque cuando empiezas a verla, parece realmente una película de zombis de bajo presupuesto que basa su efectividad en el truco de que sea todo un plano secuencia, hasta los títulos de crédito. Por eso la sorpresa cuando nos presenta su giro. La versión francesa es mucho más artificiosa desde el principio, con momentos que claramente están puestos para chistes posteriores, lo que hace que sea más previsible y no fluya con la misma naturalidad de la original. Además, tampoco ayuda a la francesa que casi todos los chistes procedan de la película japonesa, con pocas aportaciones originales.
La película de Hazanavicius tiene su encanto, funciona como comedia, pero no aporta nada nuevo más allá de tener un buen reparto. Si quieres ver One cut of the dead, se puede adquirir de forma bastante fácil, ya que fue editada en Blu-ray/dvd por Cameo, de modo que aconsejo verla antes o en lugar de la versión francesa.