Ed y Lorraine Warren (Patrick Wilson y Vera Farmiga) se ven envueltos en un nuevo caso de casa encantada que tiene lugar en el norte de Londres. Un caso que resultará ser el más complicado y diabólico que han investigado y que puede costarles la vida.
James Wan es uno de los mejores directores de cine de terror de la actualidad. Con Expediente Warren: El caso de Enfield (The Conjuring 2, 2016) logra superar la primera entrega, además de crear un soberbio film de terror. Y lo hace de manera que parece fácil: un susto aquí y allá, una buena banda sonora, mover la cámara de forma fluida y ya está. Pero teniendo en cuenta la cantidad de películas del mismo género que resultan mediocres y repetitivas, está claro que es algo mucho más que eso.
Una de las razones por las que el film resulta tan efectivo es que se deja respirar al espectador para que conozca a los personajes y se interese por ellos. Espaciando al principio los sustos, para crear una atmósfera de inquietud y angustia. El film arranca con los Warren investigando el famoso caso de Amityville, en concreto intentando averiguar que llevó a Ronald DeFeo a matar a toda su familia (si os interesa, os recomiendo la película Amityville II: La posesión [Amityville II: The Possession, Damiano Damiani, 1982]). Tras este intenso principio, se abandona a los Warren para conocer a la familia que sufrirá ataques del más allá. Aquí, se empiezan a introducir elementos inquietantes, algunos muy sutiles, pero sin agotar al espectador con súbitos estallidos musicales cada vez que sale un gato o un personaje le pone la mano en el hombro a otro. Aquí no hay falsos sustos, cada vez que sucede algo es “real”.
Wan introduce también algunos momentos visualmente surrealistas, pero cuando ya se está metido en la película y se está dispuesto a aceptarlo dentro del contexto del film. En este sentido, representa una evolución visual respecto a la primera entrega, más clásica. También ayuda a la credibilidad el excelente reparto, encabezado por Farmiga y Wilson como el matrimonio Warren. Ambos actores saben hacer que el espectador crea lo que está sucediendo en pantalla, porque sus personajes lo creen. También destaca la joven Madison Wolfe como Janet Hodgson, la principal víctima de los ataques sobrenaturales.
Desde la inquietante banda sonora de Joseph Bishara hasta el montaje de Kirk M. Morri, todo suma para que El caso Enfield se convierta en un gran espectáculo aterrador. Más espectacular y absorbente que la primera entrega, Expediente Warren: El caso Enfield es un film de terror que cumple su promesa de hacer que el espectador lo pase muy bien pasándolo muy mal.
Estreno en las salas españolas el 17 de junio