El noruego Martin Ernstsen adapta a novela gráfica Hambre, la novela del también noruego Knut Hamsun (1859-1952) publicado en 1890 y que está considerada como la novela de su país más influyente de la historia. Cómic por publicado por Nórdica Libros, lo destacamos hace unas semanas como uno de los cómics de lo mejor del 2021 en Underbrain, era de justicia realizar una reseña en condiciones tras su paso por Underbrain Show.
El protagonista es un pobre escritor y periodista que lucha a diario por conseguir algo con el que alimentarse. Apenas consigue publicar un texto en el periódico su orgullo se hincha y con la poca ganancia su actitud ante la vida es totalmente distinta pero tan pronto vuelve a estar en ruina todo se repite de nuevo. Es un hombre solitario, así que mantiene mucho diálogo interno pero es así como vivimos en primera persona sus ingeniosas soluciones o los momentos de más penuria y perdida de esperanza, que pronto revitalizará con otra sustanciosa observación y un sueño por el que luchar. Sus ánimos son tan volátiles que muestran la gran humanidad y bondad del personaje, y en un paso todo lo contrario siendo egoísta y ruin.
La historia tiene sus elipsis lo que nos ayuda a centrar más la atención en diferentes situaciones, de pasar a días sin comer a tener una mañana prometedora o a encontrarse sin saber donde dormir. Pero lo más inspirador, o que más enternece en esta lectura, es el espíritu soñador y esa constante lucha del protagonista por un mañana mejor, donde todo forma parte del camino pero que pronto cambiará a mejor.
Más allá de su fantástica historia, es el trabajo gráfico y narrativo de Martin Ernstsen el que nos tiene absortos. Con un dibujo de personajes más cercano al underground americano de los 70, sus acuarelas rompe con esta línea para ofrecer momentos ilustrados que van de los más oscuros a la fantasía o el delirio. La consecución de situaciones sin viñetas, la transformación del propio protagonista a facciones más caricaturescas o cuando toca representar esos momentos de introspección o diálogos con el de arriba denota toda la creatividad vertida del autor para trasladar un texto que no parece nada fácil.
Hambre ha sido editado en un gran volumen en tapa dura, una edición exquisita la de Nórdica Libros con el que profesa el respeto a esta obra y sus autores, tanto por el autor del texto original como por el autor del cómic. Una lectura divertida, frustrante, inspiradora y cercana (porque poco importa que el hambre sea de finales de siglo XIX, se parece mucho al del XXI).