Le amas o le odias, no hay término intermedio con Shintaro Kago, autor rara avis en el panorama del manga que cuenta con las obras más inclasificables que puedas encontrar: es terror, es humor, es erotismo, es… guro, término japonés que sí logra englobar en cierto sentido este tipo de publicaciones.
Como ya hiciese en La formidable invasión mongola, Shintaro Kago acude de nuevo a nuestra historia para reinventarla de la forma más surrealista y desagradablemente divertida posible. 16 capítulos en los que explora los inventos, incidentes y revoluciones que marcaron nuestro presente a partir de la vida de algunas personalidades como Adolf Hitler, Cristobal Colon, el príncipe Shōtoku, Nobunaga Oda., Mathhew C. Perry… De este modo conocemos las «verdaderas» biografías de una realidad paralela cuyas comunicaciones entre pensadores se realiza con tubos conectados a las uretras y en función del orín enviado en código morse se transmiten la información, o en la que se acude a hombres de la lluvia para realizar una arma con la que atacar a los navíos rivales, si no, cuando utilizan rellenos de sostenes para armar edificaciones o fuerzas motrices, sin olvidarnos, por ejemplo, de la capacidad de extraer retinas de los muertos para capturar una imagen fija, generando así artilugios para crear incluso imágenes en movimiento.
Compendio de la verdadera historia universal inicia así una realidad alternativa en la que cada descabellada y absurda invención propuesta por el autor tiene sentido y lógica, su funcionalidad será reutilizada según avanza todo concluyendo en un alocado y fantástico capítulo final.
Shintaro Kago plasma en sus páginas mutilaciones, sangre, imágenes escatológicas, … sin que estas sean el quid del manga, por lo que cuando más cuesta mirar, más quieres ver. También va servido de grandes risas, si el humor negro es lo tuyo, lo que hace que quieras conocer más de esta nueva historia universal.
ECC Cómics recupera así otra obra de este singular autor de la que ya hemos comentado Fetus Collection y la ya mencionada La formidable invasión mongola, siendo estos solo algunos de toda su vasta obra que tenemos la suerte de leer ya en castellano.