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300: El origen de un imperio

He de admitir que en un principio era bastante escéptico ante el interés que podía tener 300: El origen de un imperio (300: Rise of an Empire, Noam Murro, 2014), pero su naturaleza camp del siglo XXI y la poderosa presencia de Eva Green, como la comandante Artemisia, hacen de este un film tremendamente entretenido.

300: El origen de un imperio

El origen de un imperio es al mismo tiempo precuela y secuela de 300 (Zack Snyder, 2006). Pone en contexto los eventos que llevan a 300 y gran parte del film transcurre de forma paralela a lo que sucede en el film de Snyder. Por ello, Murro se dedica a reproducir la estética y el estilo que Snyder estableció en su película para que quede claro que transcurren en el mismo universo y no desentonen entre sí. Sin embargo, la adopción de este estilo hace también que en ocasiones el film se acerque al ridículo, haciendo cierto un chiste de Futurama en el que se clasificaba una ficticia Los vigilantes de la playa: La película como la primera realizada por entero en cámara lenta. Un chiste que se puede aplicar a esta película perfectamente, que en ocasiones parece un videoclip de Lana Del Rey.

Fotograma de 300: El origen de un imperio

Pero esta es una película en la que sus defectos son también sus virtudes. Aunque ofrece unas dosis de violencia y sangre imposible de encontrar en cualquiera de los peplums que protagonizara en los 60 Steve Reeves, El origen de un imperio no es muy diferente de aquellas peripecias protagonizadas normalmente por gladiadores musculosos. Su total ausencia de ironía, su homoerotismo desatado, su ansía de épica por el simple placer de la épica y su ridículamente exagerada violencia acaban haciendo de El origen de un imperio un film divertido, entretenido y muy disfrutable.

Fotograma 2 de 300: El origen de un imperio

Las interpretaciones no son nada del otro mundo, con la excepción de los dos únicos personajes femeninos: Lena Headey vuelve como la reina Gorgo, más que dispuesta a vengar la muerte de su marido Leónidas, y Eva Green, cuya habitual poderosa presencia en pantalla se ve reforzada por un personaje, Artemisia, que le facilita momentos épicos. Sullivan Stapleton es el algo soso Temístocles, el general ateniense que dirige una masa de musculosos guerreros algo difícil de distinguir entre sí.

Si queréis realismo y rigor histórico, aquí no lo encontraréis, pero si os dejáis llevar por el absurdo y la hiperestilización de la película, 300: El origen de un imperio os puede proporcionar un buen rato de diversión.

Estreno en las salas españolas el 7 de marzo.

© Imágenes: Warner Bros.