Esta crítica no contiene ningún spoiler, se puede leer sin miedo.
Si algo caracterizaba los cómics de DC en oposición a la Marvel, es que los héroes de DC eran los arquetipos, los dioses que caminaban por la Tierra. De modo que sus traslaciones al cine requerían cierta épica, cierta grandeza, que pocas veces han alcanzado. El intento por parte de Zack Snyder de crear una gran épica, más la completa incomprensión de lo que hacía que Superman fuera Superman, convirtió El hombre de acero (Man of Steel, 2013) en un desastre artístico. Sin embargo, en Batman v. Superman: El amanecer de la justicia (Batman v Superman: Dawn of Justice, Zack Snyder, 2016) gran parte de los errores que lastraban El hombre de acero son corregidos, de modo que esta nueva entrega del universo cinematográfico DC es la película épica que ambos personajes se merecen.
El film arranca dos años después de los eventos narrados en El hombre de acero. Tras ver la destrucción provocada por los kryptonianos, Bruce Wayne alias Batman (Ben Affleck) observa con desconfianza las acciones de Superman (Henry Cavill). La desconfianza es mutua y, en su faceta como Clark Kent, Superman también observa con desconfianza las acciones del justiciero de Gotham. Mientras la tensión crece entre los dos héroes, Lex Luthor (Jesse Eisenberg) planea crear un arma con kryptonita para tener a Superman bajo control.
A pesar de su larga duración, la historia que cuenta es bastante sencilla. Lo cual es un acierto ya que así se concentra en desarrollar los personajes y sus distintos conflictos (y hay muchos personajes que desarrollar). Principalmente se centra en las consecuencias que tuvo la batalla del anterior film y qué significa la aparición de seres superhumanos (tema ya tratado en el universo cinematográfico de la Marvel), lo que alimenta el conflicto que da título al film. Además, se ocupa de plantar las semillas de lo que será La liga de la justicia. En este sentido, la inclusión de Gal Gadot como Wonder Woman sufre y no se le da todo el tiempo que se merece (es posible que esto se solucione en la ya anunciada versión extendida que aparecerá en Blu-ray).
Es cierto que el principio del film puede resultar algo lento, debido principalmente a la continua introducción de personajes, pero la espera vale la pena y la parte superheroica del film es doblemente satisfactoria debido al cuidado desarrollo de la película. También ayuda el buen trabajo de su reparto. Secundarios de lujo como Jeremy Irons, Laurence Fishburne y Holly Hunter suben la calidad dramática del film sin esfuerzo. Affleck es toda una revelación como un Batman mayor (en edad y tamaño) que inevitablemente recuerda al Batman que Frank Miller ilustró en la clásica El regreso del señor de la noche. Cavill está correcto como Superman, aunque no resulte particularmente carismático. La Lois Lane de Amy Adams funciona mejor en esta entrega, posiblemente porque su personaje tiene más sentido y funciones que en la anterior. Gadot como Wonder Woman ya hemos comentado que aparece poco pero lo suficiente como para que queramos ver más Diana Prince en el futuro.
La interpretación que puede dividir a los espectadores (especialmente considerando cómo lo doblarán) es Eisenberg como Luthor. A primera vista es como si Eisenberg siguiera interpretando a Mark Zuckerberg después de que Zuckerberg sufriera una crisis psicótica. Pero teniendo en cuenta que se supone que has de odiar al personaje, y eso Eisenberg no cabe duda de que lo consigue, yo diría que es una buena interpretación.
No entréis a ver la película con la idea de pasar un par de horas viendo a dos héroes darse mamporros. Este es un film que requiere cierto esfuerzo pero que a cambio ofrece un gran espectáculo, la gran épica que la anterior película no supo ofrecer. El tipo de película que se ha de disfrutar en el cine, en pantalla grande, para que nos atrape la grandeza de su espectáculo.
Estreno en las salas españolas el 23 de marzo.