Amy Schumer debe ser toda una eminencia en Estados Unidos, cuenta con show propio y todo… pero no fue hace escasas semanas cuando supe de ella, y fue por las polémicas fotografías en las que aparece realizando una felación a una espada láser de Star Wars, bailando cancán con los soldados imperiales o en la cama con R2D2 y C3PO, entre otras. Estrena ahora su primera película como protagonista absoluta, Y de repente tú (Trainwreck, Jud Apatow, 2015) y por si no fuera suficiente, también escribe el guion en solitario.
Y de repente tú se centra en la vida de Amy (Amy Schumer), una chica que no cree en la monogamia, en las relaciones afectivas de larga duración. Su hermana (Brie Larson) es todo lo contrario, con una pareja y un hijo creen en la vida familiar. Amy trabaja para una revista y su siguiente reportaje le lleva a conocer a Aaron Conners (Bill hader), un médico deportivo, que hará que se plantee las palabras que su padre (Colin Quinn) le inculcó de pequeña.
Con una primera secuencia, muy divertida, y una primera parte en la que conocemos a Amy, Y de repente tú es todo lo que se espera por las promociones en las que no dudan en decir que se trata de los productoras de la imprescindible comedia La boda de mi mejor amiga (Bridesmaids, Paul Feig, 2011). Amy es malhablada, soez, sexualmente deshinibida y sin tapujos lo que arranca más de una risa por su exageración en una sociedad más bien puritana. Pero lo bueno se acaba rápido y tan pronto como entra la trama se deshincha, los gags manidos, la estructura se convierte en la clásica comedia romántica (¡esto no es lo que se esperaba!) pasando por el drama y haciendote olvidar lo bien que te lo pasaste al principio. Ni un número musical final logra que recupere la forma.
Cuando de repente aparece en pantalla el nombre de Jud Apatow; director que tuvo buena acogida con Virgen a los 40 (The 40 Year Old Virgin, 2005) y Lío embarazoso (Knocked Up, 2007) pero que se fue mermando con Hazme reír (Funny People, 2009) y Si fuera fácil (This Is 40, 2012). Su fuerte siempre ha sido el de dar el trampolín a cómicos del stand-up a la pantalla grande, hasta ahora le ha ido bien con Seth Rogen o Lena Dunham, por ejemplo. Con Amy lo va a tener difícil a nivel internacional, al menos. Mientras que Kristen Wiig si lograba un guion divertido de principio a fin, y sabiendo otorgar protagonismo al resto del casting, en La boda de mi mejor amiga, Amy Schumer escribe un largo de dos horas en que los chistes sexuales, racistas y homofobicos campan a sus anchas, y todo queda descompasado sin lograr mantener el interés durante todo el metraje.
Muy excéntrica, como no podría ser de otra manera, es la interpretación de la camaleónica Tilda Swinton (Snowpiercer (Rompenieves), Sólo los amantes sobreviven, El gran hotel Budapest) como jefa de la revista en que trabaja.
Brie Larson (Las vidas de Grace) ejerce el contrapunto serio a la protagonista, pero ella junto a su familia no escasean en ocupar algunos de los momentos divertidos del largo.
Además en Y de repente tú encontramos muchos cameos con papeles de personalidades que son totalmente desconocidos por estos lares, el luchador del WWE John Cena, los jugadores de básquet LeBron James y Amar’e Stoudemire, … También aparecen Daniel Radcliffe (Harry Potter) y Marisa Tomei en una película dentro de la película, sin mucho acierto, y alguna cara más.
Su estreno en las salas españolas es el 14 de Agosto.
