Ya nos advirtió que lo haría, Rafael Fernández (aka Ezcritor) ha publicado su primera novela 20 polvos, bajo el sello Mi cabeza editorial.
En portada se puede leer Texto no recomendado a menores de edad ni a nadie, es una justa advertencia; porque lo que esconde las páginas de dentro no creo que tenga el perdón de DIOS.
20 polvos es literatura neosubversiva aunque eso lo explicaré más tarde. Desde la primera palabra hasta la última, nos adentramos en la mente de Sigmundo, un tipo de 33 años dispuesto a triunfar como escritor. Página a página vivimos y pensamos como él (aunque esto nos pueda aterrar). Su estancia en Fuerteventura junto a su querida «Virgen María», de como con un trabajo basura, su nefasta vida sexual y sus instintos de escritor reprimidos terminan por explotar hasta finalmente ganar un premio nacional y emigrar a la capital, Madrid. Una nueva aventura que le llevará a vivir como en una montaña rusa, anímicamente hablando, de saborear el éxito a no tener nada, de estar enérgico perdido a querer olvidarlo todo. Sigmundo es capaz de enternecer cuando lucha por su sueño de escritor como a ser odiado por su comportamiento machista y despreciable con las mujeres y/o la sociedad. Aunque sus convicciones (negativas) en el fondo no deja de ser un ejemplo muy radical y extremista de lo que puede llegar a pensar una parte de la sociedad (tanto sus palabras racistas como misóginas).
20 polvos es literatura neosubversiva, porque en donde iría el desenlace lógico (o esperado) aquí es una mera ilusión. El protagonista persigue un sueño que parcialmente alcanza, trata de regenerarse con una promesa que finalmente será nefastamente cumplida. Asistimos durante las más de 200 páginas al pensamiento de un humano, como tú y como yo, pero que se comporta al margen de los patrones que marca la sociedad (nada ejemplar) pero que sin embargo, humano. Es feliz por momentos como triste por otros, y es la duda que asola en las últimas frases la que le/nos define (éste será el último polvo… o el penúltimo), siempre queremos más, aunque lo sepamos siempre pensaremos que la felicidad no es lo que tenemos sino lo que nos falta, cuando no debiera ser así.
Por encima de todo, es una novela con grandes momentos pornográficos, auténticos momentos de terror y con una miranda irónica de la sociedad a través de su personaje. Y si ves entre líneas, risas aseguradas.
Además su lectura despierta mucho interés en saber que momentos son veraces y cuales ficticios, porque la vida de Sigmundo no deja de ser una versión distorsionada del escritor, que también emigró a Madrid tras ganar un concurso de blogs, por lo que es muy posible que compartan miedos y alegrías.
Rafael Fernández con 20 polvos logra hacer literatura underground, autoeditada y sin censura, y muy posiblemente de culto. En la solapa final anuncia la publicación de los primeros diarios de Sigmundo, de su alocada vida sexual en una discoteca de las Canarias, algo que deseo leer ya y que complementará esta lectura sin duda.
20 polvos, ha sido publicado en España por Mi Cabeza Editorial. rústica. 262 páginas. Tamaño 19,5 x 12,5 cm.