El actor George Clooney ha tenido una carrera variada como director, con películas interesantes como Confesiones de una mente peligrosa
(Confessions of a Dangerous Mind, 2002) y otras más bien intencionadas que efectivas, como Monuments Men (The Monuments Men, 2014). Pero siempre ha contado con un gran reparto, y Suburbicon (2017) no es ninguna excepción. Entre los principales actores nos encontramos a Matt Damon, Julianne Moore y Oscar Isaac (Ex Machina).
Nos encontramos en los años 60. Suburbicon es una ideal comunidad residencial que ejemplifica el sueño americano. Por lo menos hasta que se producen dos eventos que trastocan a la población: se instala una familia negra en el vecindario y unos extraños invaden la casa de los Lodge y asesinan a Rose Lodge (Julianne Moore)
Suburbicon se basa en un guion escrito a mediados de los 80 por los hermanos Coen, actualizado por Clooney y Grant Heslov. Por ello, la película tiene un regusto a las películas clásicas de los Coen, por la manera en que se mezcla una trama criminal con comedia negra, todo ello regado con la fascinación de los Coen por la estupidez humana. Un estilo que nos remite a Fargo (Joel y Ethan Coen, 1996) y Sangre fácil (Blood Simple., Joel y Ethan Coen, 1984). Un estilo que nos ajeno a Clooney y Heslov, por las colaboraciones del primero con los hermanos Coen y el trabajo del segundo como director de Los hombres que miraban fijamente a las cabras (The Men Who Stare at Goats, 2009).
Clooney maneja bien el trabajo de navegar por los distintos tonos, de la comedia al drama y de vuelta a la comedia, pero no tan bien las dos historias paralelas, que no acaban de integrarse de forma satisfactoria. El tema del barrio residencial como metáfora de los problemas del país no es nuevo. La perfecta comunidad por fuera que está podrida por dentro ha sido usada cientos de veces en diversos géneros y series de televisión, desde el clásico de Joe Dante No matarás… al vecino (The ‘Burbs, 1989) hasta la reciente serie Riverdale. Y admito que es un tema que siempre me ha gustado. Por eso, a pesar de sus problemas, esta película me ha resultado interesante y entretenida. En especial cuando la trama criminal empieza a coger cuerpo, con una excelente parte final.
Por supuesto, el excelente reparto también ayuda. Julianne Moore interpreta a dos hermanas gemelas que parecen dos personas distintas, pero destaca especialmente Matt Damon como el hombre superado por las circunstancias camino de convertirse en un monstruo.
Como ya he mencionado, el guion fue originalmente escrito por los Coen a mediados de los 80, tal vez por eso la estructura de Suburbicon recuerda bastante a la de Sangre fácil. En este caso, debido a la trama alrededor de la reacción racista por la familia recién llegada, el factor dramático hace que el factor criminal se desarrolle algo lentamente, hasta llegar a la explosión de eventos que nos conduce hasta el clímax del film. De nuevo, para mí no ha sido un problema porque me interesaba el tema y me gustaba el estilo retro del film, enfatizado por la herrmannesca banda sonora de Alexandre Desplat, pero si no compartís estos intereses puede que se os haga algo lenta. De todos modos, a pesar de sus problemas, encuentro que es un film muy recomendable.
Estreno en las salas españolas el 8 de diciembre